Mujeres atoradas en un conflicto ha habido muchas. Las guerras no tienen género, son procesos de resolución de problemas sociales, culturales, políticos, religiosos, étnicos, de pueblos, comunidades y Estados. A través de la historia encontramos mujeres con parte activa en el desarrollo de maniobras belicosas de trascendencia universal, siendo condenadas o convirtiéndose en heroínas.

En Colombia, se ha vivido un conflicto de medio siglo con unas plataformas ideológicas muy débiles tras la caída de los iconos del socialismo, a partir de allí vinieron unos intereses de grupos que buscaban poder, amasar fortuna ilícita a través del narcotráfico, y despojar campesinos y ganaderos de sus propiedades con métodos terroristas. El Estado nunca pudo imponer el orden, y la Sociedad civil tuvo que autodefenderse: Así nacen las AUC, Autodefensas Unidas de Colombia, para combatir con guerra sucia al margen de la ley, el fenómeno terrorista insurgente.

Con los bombos sonando en el proceso de Paz entre el Gobierno Santos con las FARC. EP, valga decir de los mas accidentados del mundo, con baja credibilidad entre la Sociedad y un futuro político muy escéptico; encontramos una reinsertada de las AUC que hoy trabaja por la reconciliación y mira este tipo de procesos como la panacea para reinventar una nueva sociedad sin discriminación y con oportunidades para todos.

Ella es Gloria Patricia Castañeda, Reinsertada de las AUC, hoy Promotora  para la Reintegración, de la Agencia Colombiana para la Reintegración, ACR, mujer delgada, de estatura baja, morena, cabello liso, ojos miel muy vivaces, muy pausada pero con facilidad de palabras, su sonrisa se asoma tímidamente pero sincera. Vestida con el chaleco rojo que identifica la ACR desnuda su mente y con mucha seguridad nos cuenta:”Desde que inicié el proceso de reintegración confié en que este me iba a llevar nuevamente a mi comunidad, a mi familia y sobre todo a recuperar ese espacio personal obviando dificultades como las inseguridades e incertidumbres . Hoy el paso por la Universidad de Antioquia me nutrió del apoyo de los estudiantes y docentes; sin embargo, a la sociedad le hace falta mucho creer en este proceso”.

Para Gloria Patricia, la articulación de todas las instituciones va a lograr que estas personas crean en la oportunidad que se les brinda al desmovilizarse de un grupo armado y hace una invitación para que aprovechen estos espacios que se están dando con los Diálogos con las FARC.EP hablando todo el lenguaje de la fraternidad. Estas personas estuvieron allí por motivos diferentes, entonces que no les de miedo enfrentarse a esta nueva etapa de sus vidas, por ejemplo, las reclutadas no son victimarios sino víctimas.

Con mucha seguridad expresa: “Reconstruyan sus vidas, demuestren sus talentos que tienen, y que la educación y la formación que acá van a tener a través de la ruta, que es un tiempo limitado pero propicio, encontraran la manera de reintegrarse a la comunidad”. Ella ha viajado al exterior y sus experiencias son imborrables: “Estuve en Barcelona, España, allí la ACR es un referente Nacional, socializamos los pasos de los desmovilizados, se contaron historias muy sorprendentes de la guerra; pero la gran curiosidad era saber cómo se reintegraban estas personas a la vida civil”.

Con palabras cargadas de mucha sinceridad, la hoy Promotora para la Reintegración, manifiesta que la guerra siempre va a existir con su violencia, que se necesitan muchas personas para que vengan a corregir y no a repetir acciones que alimentaran el conflicto. Si le duele el alma cuando recuerda esa mordaza jurídica que se negoció en Santa Fe de Ralito, porque ellos los exAUC, no tienen derecho a ser elegidos, a la participación política y a  trabajar con entidades públicas; pero hay una luz en el horizonte: “Estamos viendo esto como una necesidad de unirnos, manifestándonos a través de mesas de trabajo, de organizaciones, nos estamos organizando a nivel Nacional para llevar a otros escenarios la modificación de esta ley”. Manifiesta emocionada.

De igual manera, Gloria Patricia Castañeda, y todos los desmovilizados de las AUC, son optimistas y piensan que mientras estén en la ruta de la desmovilización y se cumplan los compromisos del proceso van a tener el aval y respaldo durante 4 o 5 años mas después de la notificación de la condena, esperan que en ese lapso de tiempo se haya modificado esa ley.

Hoy Gloria, sueña con un País en Paz, con oportunidades para todos y sin discriminaciones sociales, culturales, políticas, y todos comprometidos con el Desarrollo, la Justicia y la Prosperidad.