Según las autoridades cansado de los malos tratos dentro de la organización criminal, un integrante entregó una caleta en el municipio de Turbo con armas avaluadas en 1000 millones de pesos, que iban hacer distribuidas en el Bajo Cauca antioqueño.
El Coronel Luis Eduardo Soler Comandante de la Policía de Urabá, afirmó que “hay una ruptura dentro de la banda criminal, porque no se le ha venido pagando sueldos a los subalternos; están casados de los malos tratos de parte de los cabecillas, algunas veces a los integrantes de menor rango, y en otras hacia sus familiares”.
El armamento estaba enterrado en unas canecas en la vereda Puya Arriba, en el municipio de Turbo.
En el hecho las autoridades encontraron 33 fusiles, 3 pistolas, 15 mil cartuchos, 36 proveedores y una motocicleta de alto cilindraje.
Según la Policía Nacional el armamento al iba ser entregado a alias “Pablito” para que montara un pelotón, con 33 personas en el Bajo Cauca antioqueño, y que su objetivo era ocupar terrenos dejados por las Farc.
