Una familia en Tuluá, en el Valle del Cauca, denunció un hecho que causa indignación entre los habitantes del municipio. A la espera de recibir los restos de una bebé, quien había fallecido mientras se encontraba en el vientre de la madre, la familia recibió una bolsa con una rata muerta. De acuerdo con lo que informó Noticias Caracol, y el portal de Turbaco News, se desconoce el paradero del cuerpo de la menor que habría nacido en el Hospital Departamental Tomás Uribe.

Turbaco News, en su reconstrucción de los hechos, informó que la madre de la menor, que tendría por nombre Emily Samara, fue inducida a parto natural cuando recién cumplía 28 semanas de embarazo. Las razones que los médicos le dieron a la madre de Emily fueron que la menor había fallecido por complicaciones en su embarazo, por lo que era necesario extraerla de su cuerpo.

El padre de la niña aseguró que su pareja había estado presentado malestares, por lo que decidió ir al médico para descartar cualquier tipo de eventualidad negativa. Allí, la mujer fue atendida de urgencia, en donde se le fueron examinados sus signos vitales y los de la niña.

“Me dijo (el personal de salud que atendió a la mujer) que la bebé no tenía frecuencia cardiaca, ni latidos en el corazón. La dejaron hospitalizada en la noche. En la mañana le dieron una pasta para madurar el útero, a las 10 le dieron otra para acelerar el procedimiento para que saliera la bebé que ya estaba muerta”, le dijo el padre de Emily, Daniel Alejando Jaramillo, al periodista del medio Valle al Instante, en una transmisión en vivo de Facebook.

Luego del procedimiento médico ejecutado sobre la mujer, ella misma le comentó a su pareja que no había tenido la posibilidad de ver mucho a la niña, y que no tuvo contacto con ella. El hombre, padre de Emily, se acercó al hospital para hacer los trámites respectivos para recoger el cuerpo de la menor, sin embargo, al llegar, se le hizo extraño que “nadie sabía que una bebé había fallecido” ahí.

Cuando el personal de servicios funerarios llegó al hospital, informó Noticias Caracol, el padre de la niña solicitó verla antes de que se la llevaran, y allí fue cuando se hizo el lamentable hallazgo. Dentro de la bolsa roja, que se encontraba al interior de una caja de icopor, había una rata muerta, y no el cuerpo de la menor.

“Cuando desamarramos las bolsas, había una totalmente sellada, ahí había una rata como el tamaño de una zarigüeya, y ahí, dentro, también había unos guantes quirúrgicos”. La bolsa estaba sellada con un esparadrapo que tenía todos los datos de la bebé. Según lo que se leía en la bolsa, la niña había fallecido el 15 de mayo de 2021 a la 1:22 de la tarde.

En las últimas horas, tras la divulgación de la noticia, y las manifestaciones de la familia de Emily en sus redes sociales, el Hospital Departamental Tomás Uribe Uribe se manifestó y, a través de un comunicado oficial, aseguró que se iniciará una investigación interna para esclarecer que pasó con el cuerpo de la pequeña niña, lamentó lo sucedido con la menor, y se puso a disposición de cualquier necesidad de la familia.

A la espera de noticias para esclarecer que sucedió con el cuerpo de la menor, la familia se mantiene a las afueras de las instalaciones del establecimiento con carteles en los que se lee “exijo la entrega de mi bebita. Viva o muerta” y “el sábado nació Emily Samara y el hospital no la entrega aún”.

Vía: Infobae.com.