El presidente Iván Duque viajó a Cali en la tarde de este martes. No se tenía noticia de este viaje del jefe de Estado, por lo que hasta varios miembros de su gabinete no tenían conocimiento de las intenciones del primer mandatario. La llegada de la comitiva presidencial fue alrededor del mediodía a la base aérea Marco Fidel Suárez.

A su llegada a Cali, se confirmó que el presidente tendrá encuentros con los representantes del paro en la ciudad. En estos encuentros también participarán el ministro de Defensa, Diego Molano; el ministro del Interior, Daniel Palacios; la ministra de Educación, María Victoria Angulo; miembros de la cúpula militar y policía departamental, entre otros.

Desde hace varios días se venía reclamando la presencia de Iván Duque allí, sobre todo después de la jornada de violencia del domingo, donde se presentaron ataques con armas de fuego a la minga y actos de vandalismo por parte de la representación indígena.

En un primer momento, la respuesta desde la Casa de Nariño fue abstenerse de ir a la capital del Valle del Cauca “por prudencia”. Según el presidente, su presencia en la ciudad podía distraer a la Fuerza Pública de su tarea de recuperar el orden público. No obstante, esta postura no gustó a distintos sectores, incluidos miembros de su partido.

Uno de los primeros en reaccionar fue el senador vallecaucano Gabriel Velasco: “Miles de caleños confiaron su voto en mí y en usted. Para no distraer a la bancada, con su abandono por mi ciudad, renuncio a la vocería del Centro Democrático”. Esta respuesta vine acompañada de otras expresiones de molestia de miembros del Centro Democrático.

Luego de este cruce de comentarios, el país despertó a comienzos de esta semana con la noticia de que Iván Duque sí había ido a Cali. Lo hizo en la madrugada del lunes; Este estuvo en la ciudad desde la 1 de la mañana y hasta las 4 de la mañana, hora en la que volvió a Bogotá. En su breve estadía, celebró un consejo de seguridad con el alcalde Jorge Iván Ospina, y la gobernadora del Valle del Cauca, Clara Luz Roldán.

Después de esta visita relámpago, se presentaron reacciones encontradas. Por un lado, el propio senador Velasco celebró la visita y la catalogó como un pequeño paso para recuperar el orden público en la ciudad. Mientras que otros sectores, sobre todo de oposición, tildaron la movida como una “jugadita”.

Poco más de 24 horas después de la primer visita, el presidente vuelve a la ciudad, esta vez a la luz del día. Todo apunta a que allí se encontrará con las autoridades locales y se encontrará con las principales voces de las movilizaciones en una de las ciudades que más ha sido golpeada en el marco del paro nacional.

Vía: El Espectador.