Juan Carlos Gómez Ortiz, alias “Rango”, de 38 años, sería en este momento la cabeza del grupo armado Los Caparros’, una de las cinco redes criminales que por su poder de afectación a la sociedad puede ser enfrentada con todo el poder del Estado, es decir, hasta con operaciones de bombardeo.

‘Los Caparros’ han hecho presencia especialmente en Tarazá, Caucasia y Cáceres, en el bajo Cauca antioqueño, y parte del sur de Córdoba, dedicados al narcotráfico, minería ilegal y extorsiones; librando además una guerra territorial con el ‘Clan del Golfo’ desde hace seis años, lo que incrementó las cifras de homicidios en la región y generó el desplazamiento de unas 2.800 personas, según las autoridades.

“Rango” estaría huyendo con máximo cinco hombres de confianza, y de acuerdo con fuentes de la Policía Nacional, estaría buscando someterse a la justicia a través de un grupo de abogados, ya que considera que la muerte hace dos semanas de ‘Flechas’, el otrora jefe de la red, en una operación coordinada entre la Policía y el Ejército, tuvo como base una “traición interna para cobrar la recompensa de 700 millones que se ofrecía”.

El otro escenario que estaría buscando concretar ‘Rango’ es someterse al ‘clan del Golfo’, la red de narcos de ‘Otoniel’, pero de acuerdo con las líneas investigativas, esto sería “casi imposible” porque ‘Rango’ fue el encargado de librar la guerra territorial contra los del ‘Clan’.

De hecho, la muerte de ‘Flechas’ llevó al ministro de la Defensa, Diego Molano a asegurar que ‘los Caparros’ habían sido exterminados como grupo y le advirtió a ‘los Pelusos’ y el ‘clan del Golfo’, y por ende a sus jefes “alias Macho y alias Otoniel, que nuestra Fuerza Pública los encontrará”.

De acuerdo con las autoridades, los cerca de 200 hombres en armas que integran ‘los Caparros’ están huyendo ante la posibilidad de ser capturados, y porque temen que Jhon Freddy Miranda Galán, alias “El Evangélico”, quien fungía como segundo jefe de la organización y se entregó a la Policía el 21 de abril, esté brindando información.

Otros miembros de la red, de acuerdo con inteligencia de la Policía, estarían tratando de reorganizarse, por el poder económico que da el tráfico de cocaína y la explotación ilícita de minerales en la región. De hecho, trascendió que están rotando varios panfletos que hablan de la aparición de unanueva organización, “panfletos que se están analizando porque la prioridad de la Fuerza Pública es cerrarle el paso a nuevas redes criminales”, dijo a EL TIEMPO uno de los investigadores.

Por su parte, el director de la Policía Nacional, el general Jorge Luis Vargas, señaló a este diario que la desarticulación de este grupo es una gran noticia para los habitantes del bajo Cauca antioqueño, “que fueron por mucho tiempo víctimas de homicidios, amenazas, desplazamiento forzado y especialmente de reclutamiento de menores de edad, como ocurrió con 8 jóvenes a comienzos de este año”.

Precisamente a ‘los Caparros’ se les sindica delasesinato de 20 líderessociales desde 2017, 16 en el bajo Cauca antioqueño, 10 de ellos solo en Tarazá y cuatro en San José de Uré, al sur de Córdoba. 

Muchas de estas personas fueron asesinadas por denunciar sus actividades ilegales o por apoyar los programas de sustitución voluntaria de los cultivos de coca, se advierte en los expedientes que se adelantan.

“Que los ‘señores’ (‘los Caparros’) pierdan poder en la región es una buena noticias, las personas viven con zozobra, esa gente es muy mala, y lo que quieren lo toman a la fuerza”, dijo a este diario una autoridad de la zona.

Señaló que esta red extorsionaba a los comerciantes, al punto de haber establecido impuesto hasta a losbicitaxistas, y de paso, a punta de presiones “instrumentalizaron a muchos residentes de la región para que les avisaran de la presencia de Ejército o Policía, ya fuera para evadirlos o atacarlos”, puntualizó.

Unlíder social, que también pidió el anonimato, recordó que cuando el Gobierno implementó los programas de erradicación voluntaria de los cultivos de coca, “el día del pago de la ayuda para la implementación de los programas de sustitución, llegan lista en mano pidiendo el 10 por ciento de lo que nos entregan”.

Un factor que desestabiliza el bajo Cauca antioqueño es la presencia del ‘Clan del Golfo’ por lo que la Fuerza Pública mantiene la operación ‘Agamenón’, que busca debilitar a esta estructura, y así lo puntualizó el general Vargas al afirmar: “los policías de Colombia trabajamos sin descanso por la seguridad de todos los ciudadanos”.

El general Vargas precisó: <<nos queda pendiente junto con la DEA el golpe final a las finanzas narcotraficantes de ‘los Caparros’ y el sometimiento a la justicia de alias “Rango”>>.

Precisamente, la Policía reporta que entre 2020 y 2021 neutralizaron a 9 de los jefes de ‘los Caparros’, por lo que reiteran esta red prácticamente esta acéfala.

Por su parte, Fredy Chaverra, politólogo e investigador experto en conflicto en la subregión del Bajo Cauca, señaló a este diario que seguramente ‘los Caparros’ “están un momento de debilidad estratégica, en términos militares, pero no hablaría de una desarticulación, y habría que esperar que la misma organización diga quién asume la comandancia del grupo”.

Por eso, precisó que no considera que estén acabados, “porque siguen ejerciendo el control social que han venido ejerciendo los últimos años en la subregión del bajo cauca.”

Vía: El Tiempo.