Juan Andrés Ruiz

En el humilde y caluroso barrio Las Malvinas de Caucasia, Antioquia; Juan Andrés Ruiz comenzaba a acudir cada vez más seguido a la polvorienta pero tradicional cancha del sector, donde para pasar el rato jugaba con sus vecinos gracias al balón que le obsequiaron por su cumpleaños número 4. La pasión por jugar fútbol se apoderó de él rápidamente. Un día su amado balón explotó y él mismo se las arregló para seguir haciendo lo que más le gustaba: “Construí mi propio balón con pacas de agua, las cuales rellenaba con diferentes tipos de bolsas, pero no quería quedarme solo ahí, quería superarme y jugar en una escuela de fútbol”. Al parecer, el haber superado este primer obstáculo en el deporte le dio esa motivación necesaria para seguir este camino: “Todos los días me iba para la cancha a trotar, le daba 7 vueltas. A esa edad debía tener el físico para que cuando estuviera en la escuela pudiera convencer al profesor de ser titular y goleador”, recuerda con orgullo Juan Andrés.

Esos esfuerzos darían fruto para el chico Ruiz. En el 2011 llegó al C.D Armando Arce de Caucasia viviendo por primera vez la experiencia de integrar un equipo. 5 años fue el primer ciclo del joven jugador en el club, y desde entonces, fue sumando valores importantes en su proceso formativo: “Aprendí a respetar a los profesores, a darle apoyo emocional a mis compañeros cuando íbamos perdiendo, a no rendirme y seguir adelante. Nunca bajaba la guardia”. Sin duda, estos aprendizajes contribuyen al fortalecimiento de los atributos futbolísticos de cada alumno en formación. Factores que Juan desarrolló muy bien en el club: “En la escuela mejoré la definición y me empecé a convertir en goleador. En 5 campeonatos conseguí este trofeo jugando en torneos del Bajo Cauca, Norte antioqueño y Córdoba”. Cuenta Juan Andrés con la gran decisión que lo caracteriza.

“Quedamos sorprendidos cuando a sus 4 años lo vimos en un partido amistoso ya dominando la pelota y regateando. Siempre me gustó porque es de esos jugadores que van para adelante, no es tan colectivo pero siempre busca el gol. Adquirió una riqueza técnica desde su juego en las calles y en el barrio. Ya en la escuela le enseñamos otros conceptos”. Así lo describe Erly Charles Paternina quien fue uno de sus formadores en el C.D Armando Arce.

Juan Andrés Ruiz

Y es que cuando un jugador en formación cuenta con actitud, talento y buenos valores, necesita un acompañamiento adecuado por parte de la familia, los compañeros y los entrenadores, y de esta manera tener un mayor provecho de sus virtudes deportivas, sin importar el entorno. Es por eso que su tía Norelis Ruiz ha sido tan importante en su vida: “Ha sido difícil porque somos una familia de bajos recursos pero lo hemos acompañado con las ganas de que él salga adelante. Es su sueño ser futbolista profesional”. La señora Ruiz recuerda como por medio de ventas y otros trabajos han conseguido fondos para continuar apoyándolo. “Incluso cuando estuvimos en Ciénaga de Oro (Córdoba) lo ayudamos siempre emocionalmente. Llevábamos productos para vender en los entrenamientos y partidos para que el nunca faltara”, asegura.

“Capache” como se le empezó a conocer futbolísticamente a Juan, al igual que la gran mayoría de los deportistas de nuestro país, no es ajeno a las dificultades socioeconómicas que para muchos de ellos, terminan siendo un impedimento en su camino a ser profesionales, así que a él no solo le tocó eludir a los defensores rivales para llegar a donde está. Rebuscador como buen antioqueño Juan Andrés combinó trabajo, estudio y entrenamiento para perseguir su sueño: “Somos una familia de agricultores, tuve una infancia difícil donde me tocó trabajar mucho vendiendo y haciendo mandados, pero siempre mi familia me dio la educación y me apoyó con el deporte. Cuando jugábamos fuera del pueblo y no tenía pasajes, el profesor me los fiaba, no me importaban tanto las otras necesidades. Siempre quería jugar fútbol”, recuerda con nostalgia.

Volviendo al terreno de juego, este delantero marcó la diferencia desde sus inicios: Seleccionado a los 4 años en la cancha de su barrio para integrar un club y goleador regional en 5 campeonatos diferentes en éste. En su breve paso por el fútbol cordobés recibió la confianza del entrenador del equipo para ser capitán marcando 30 goles allí, precedido de un regreso exitoso al Bajo Cauca, donde quedó goleador de la fase regional del Baby Fútbol y de la categoría Sub-13 de los Torneos Departamentales LAF, donde también se coronó campeón. Con gran seguridad “Capache” se fijó los objetivos: “Cuando iniciamos el torneo de la Liga le dije al profesor, ‘Tranquilo que esto es de nosotros’. El me insistía en no hacer el mejor gol si no en anotar siempre que tuviera la oportunidad”.

Las buenas actuaciones de Juan Andrés permitieron que el C.D Belén La Nubia – Arco Zaragoza, uno de los clubes más tradicionales de nuestro departamento, se fijara en él para integrar su plantel en este 2020. “Me recibieron con los brazos abiertos, el cambio es duro porque el entrenamiento acá es de mucha intensidad, además me estoy adaptando al clima. Estoy muy agradecido por esta oportunidad”.

Desde ya, el goleador de Las Malvinas se prepara para seguir dejando huella en el fútbol aficionado, esta vez rompiendo las redes de la capital paisa. Al igual que todos, no ve la hora de regresar a darlo todo en la cancha.

Vía: laf.com.co