Bernardo de Jesús Posaba Pérez, tiene 60 años y  es  oriundo de la ciudad de Medellín,  desde el año 1984 está radicado en la Capital del Bajo Cauca antioqueño, el municipio de Caucasia.

Desde su llegada solo le sobran palabras de agradecimiento con la comunidad caucasiana, porque la clientela que lo tiene en cuenta desde  su taller de relojería ha sacado adelante a su familia y ha construido su vivienda.

El mono, como todos sus amigos y clientes lo conocen, vive en el barrio Nuevo Centro,  y resalta que los caucasianos son muy nobles, amigables y se apegó  mucho a estas personas y eso es lo que lo ha hecho sentir un hijo más de esta tierra.

El señor Bernardo, dice que antes de ser relojero era mecánico de aviación, el cual lo desarrollo en la ciudad de Barranquilla, donde permaneció de 6 años con la importante  empresa  Avianca, y por complicaciones de salud tuvo que dedicarse a otra fuente de trabajo. Tiempo después  estudio técnico en relojería en Medellín, y escuchaba entre sus amigos que Caucasia era una tierra de progreso  y  de personas amables;  hoy por hoy se quedó en esta tierra calurosa no sólo de clima si no de personas que lo reciben con los brazos abiertos. Será que se aplica el dicho de Caucasia, “Caucasia es una prendería, el que se queda por 6 meses se siente caucasiano”.

 El Mono,  se destaca por ser una persona perseverante  al trabajar día a día, de sol a sol, de domingo a domingo  y sacar su familia adelante,  y afirma que el trabajo de  plastificación de documento,  cambiar baterías, manillas, reparación de relojes, es un arte de paciencia.