En los últimos días fue hallada muerta una manatí hembra en Ayapel. Los resultados preliminares de los estudios realizados al animal revelan que su deceso sería por una infección producto de complicaciones en el parto.
Sobre la especie, la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge, (CVS) señaló que el manatí es una especie amenazada y tiene una función muy importante, por ser una especie ‘sombrilla’.
“Si uno conserva esa especie conserva otras de menor tamaño. El manatí sirve como indicador del estado de los ecosistemas, por su gran cuerpo y su cola que es como una un remo, ella ayuda a que los flujos de agua se mantengan en los caños. Su principal dieta es comer plantas acuáticas”, expresó el biólogo marino Rafael Espinoza Forero, de la subdirección de gestión ambiental de la CVS.
Desde hace dos años la CVS trabaja en educación ambiental en las comunidades de Ayapel sobre el manejo de manatíes y este año formulará un plan de manejo de los manatíes en el complejo cenagoso de Ayapel.
“Se conformó un grupo que se llama ‘Varamientos de manatíes’, interviene la comunidad de pescadores, colegios, alumnos, ya tienen conciencia de que el manatí es muy importante”, dijo el biólogo.
De acuerdo con la corporación, hace más de 20 años es líder en el manejo de manatíes en la cuenca del río Sinú y está iniciando un proceso en cuenca del río San Jorge.
“En la región Caribe prestamos todas las asistencias técnicas, tenemos una infraestructura en Lorica y a veces cuando se presentan varamientos de estos ejemplares en Bolívar, en Magdalena, en Sucre, nosotros acudimos allá con la fundación Omacha”, dijo el experto.
En el departamento de Córdoba ya se han liberado en la cuenca del Sinú 16 ejemplares aproximadamente.
Vía: Chica Noticias.
Contextualización de la noticia
La destrucción de su hábitat, la caza para usar su carne o grasa, la pesca accidental, la contaminación del agua o la disminución del nivel de esta en los cuerpos hídricos donde habita, son sus principales amenazas.
El cambio climático también ha tenido algunas consecuencias para este mamífero. En Colombia, por ejemplo, solo en 2016, murieron 38 manatíes en el Canal del Dique por cuenta del Fenómeno del Niño.
En el país su población oscila entre los 800 y 1.000 ejemplares, un número preocupante teniendo en cuenta la importancia que este tiene para los ecosistemas.
LEste mamífero acuático habita en los humedales del país y ayuda a mantener el flujo de la calidad del agua. Con el movimiento de su cola mueve los sedimentos contribuyendo a mantener la profundidad de los humedales donde habitan.
Consumen entre el 8 y 10 por ciento de su peso (unos 200 o hasta 600 kilos) en plantas acuáticas, lo que ayuda a evitar la acumulación de estas en su hábitat. Además, los nutrientes de su excremento sirven para alimentar los peces que albergan estos cuerpos de agua.
Vía: Semana Sostenible.
