Más de 2.000 militares de diferentes batallones se sumarían a la aspersión manual con glifosato, como parte de la nueva estrategia del Gobierno para contrarrestar el aumento de las plantaciones de coca en algunos departamentos como Nariño, Cauca, Norte de Santander, Antioquia, Valle del Cauca, Guaviare, Meta y Putumayo

A varios municipios del Bajo Cauca se extendería la fumigación manual la última semana de febrero, la cual ya inició en los municipios de Tumaco, Nariño y Condoto, Chocó, luego pasaría al Catatumbo, en Norte de Santander y Santander.

Según lo aprobado por El Consejo Nacional de Estupefacientes, la fumigación manual hace parte de una estrategia integral para la sustitución de cultivos en las regiones con más presencia de coca en el país, que incluye la sustitución voluntaria, la lucha contra las organizaciones criminales y la transformación y desarrollo integral de los territorios.